Presentación
Giabri® se presenta en envases con 10, 20, 30, 40 ó 60 tabletas.
Indicaciones
Las tabletas de Giabri® están recomendadas para el tratamiento de dislipoproteinemias primarias, que incluyen los tipos IIa, IIb, III y IV (hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia y las formas combinadas), resistentes a un tratamiento alimenticio adecuado. Las medidas alimenticias se deben continuar durante la terapia.
Dosificación
Adultos: La dosificación recomendada es una tableta (100 mg de ciprofibrato) por día. No se debe exceder de esta dosis (ver precauciones). Pacientes de edad avanzada: Igual que para los adultos, pero véase las precauciones y advertencias. Uso en caso de disfunción renal: En caso de disfunción renal moderada, se recomienda reducir la dosificación a una tableta cada dos días. Se debe monitorear de cerca a los pacientes. No se debe utilizar ciprofibrato en casos de disfunción renal severa. Uso en niños: No se recomienda su uso, ya que no se ha establecido la seguridad y eficacia en niños. Las tabletas de ciprofibrato son únicamente para administración oral.
Reacciones Adversas
Desórdenes cutáneos: Se ha informado de reacciones cutáneas principalmente alérgicas: rash, urticaria, prurito y eczema y, muy rara vez, fotosensibilidad. Al igual que con otros fármacos en esta clase, se ha informado una baja ocurrencia de alopecia. Desórdenes musculares: Al igual que con otros fibratos, se ha informado elevación de creatina fosfoquinasa (CPK) en suero, mialgia y miopatía, incluyendo miositis y raros casos de rabdomiólisis. En la mayoría de casos, la toxicidad muscular es reversible cuando se retira el tratamiento. Desórdenes neurológicos:Informes ocasionales de dolor de cabeza y vértigo. Rara vez, se ha informado mareos y somnolencia en asociación con ciprofibrato. Al igual que con otros fármacos de esta clase, se ha informado una baja ocurrencia de impotencia. Desórdenes gastrointestinales: Se han realizado informes ocasionales de síntomas gastrointestinales, que incluyen náuseas, vómitos, diarrea, dispepsia y dolor abdominal. Generalmente, estos efectos secundarios fueron leves a moderados en naturaleza y se presentaron a inicios del tratamiento, volviéndose menos frecuentes a medida que el tratamiento fue avanzando. Desórdenes hepatobiliares: Al igual que con otros fibratos, ocasionalmente se ha observado pruebas de función hepática anormales. Se ha informado casos muy raros de colestasis o citólisis. Se ha observado casos excepcionales con evolución crónica. Se ha informado algunos casos de colelítiasis. Desórdenes pulmonares: Se ha informado casos aislados de neumonitis o fibrosis pulmonar. Desórdenes generales: Sólo se ha informado fatiga rara vez en asociación con ciprofibrato. Desórdenes del sistema hemolinfático: Trombocitopenia - Frecuencia desconocida.